Cuándo podré decirte que hay momentos en los que no lo soporto, que me rindo y tiro la toalla y la cojo del suelo con toda mi rabia para volver a tirarla y pisotearla desesperada, y rota de dolor.
Échame de tu vida si quieres, pero échame ya, antes de que me arrastre y te ruegue, suplique, llore y te pida que te quedes conmigo.
Échame antes de darme más besos, de acogerme en tus brazos, de amarnos sin límites, de mirarme con esos ojitos cargados de ilusiones que no me llevan a ninguna parte.
Libérame de tu cuerpo, de tu adicción, de tu complicidad, de nuestra perfecta forma de entendernos, de tu risa...
Échame de tu vida si quieres, pero échame ya, antes de que me arrastre y te ruegue, suplique, llore y te pida que te quedes conmigo.
Échame antes de darme más besos, de acogerme en tus brazos, de amarnos sin límites, de mirarme con esos ojitos cargados de ilusiones que no me llevan a ninguna parte.
Libérame de tu cuerpo, de tu adicción, de tu complicidad, de nuestra perfecta forma de entendernos, de tu risa...